Los regalos dan placer, producen alegrías, generan
pensamientos positivos, crecemos en gratitud y somos más felices.
Resumen:
En nuestras vidas recibimos del Universo, de nuestro Padre
Supremo, de nuestro Ser Superior o como cada uno lo llame, muchos regalos y también
enseñanzas. Y lo más
interesante es que si aprovechamos las enseñanzas, también estás se convertirán
en regalos.
Este año que termina su ciclo no ha sido la excepción,
hemos recibido innumerables regalos, pero también variadas enseñanzas. Y lamentablemente
a veces las enseñanzas nos han generado tristezas, penas y dolor.
Nuestros próximos desafíos son poder interpretar,
sensibilizarnos, aprender y poder aplicar las enseñanzas y así convertirlas en
regalos.
Que el año que viene, este colmado de maravillosos regalos,
especialmente de aquellas enseñanzas que hemos logrado convertir en magníficos regalos.
Y así vivir un nuevo ciclo de nuestras vidas, en abundancia de paz, amor, alegría
y felicidad, junto con todas nuestras familias.
Un abrazo virtual, deseándoles un muy Feliz Año Nuevo.
Los regalos y enseñanzas que recibimos:
En nuestras vidas recibimos del Universo, de nuestro Padre
Supremo, de nuestro Ser Superior o como cada uno lo llame, muchos regalos y también
enseñanzas. Y lo más interesante es que si aprovechamos las enseñanzas, también
estás se convertirán en regalos.
Cuantas veces nos encontramos con dificultades en las
cosas que hacemos, pero estás dificultades nos dan luces de cómo hacer mejor las
cosas, hacerlas diferentes y esto nos produce satisfacciones y alegrías. Esto
es, una dificultad nos ha dado una enseñanza de cómo hacer mejor las cosas,
que nos produce alegría y felicidad.
En estos tiempos de pandemia es el caso de la
mascarilla, que tanto nos
ha costado usarla, quizás porque nos dificulta hablar con facilidad, pero nos
ha enseñado que nuestros oídos quedan libres y debemos escuchar más que hablar.
Cuando aprendemos y escuchamos tantas cosas interesantes, que antes no le
poníamos atención por querer responder, nos genera una sensibilidad de lo
importante que es escuchar, llenándonos de alegría, porque comprendemos de
mejor forma a las personas con las que conversamos.
Quizás el caso más profundo es con nuestra naturaleza,
que la maltratamos y castigamos con ese ego de querer dominarla. Pero sabemos
que la naturaleza no la podemos controlar, y que por el contrario cuando
aprendemos a coexistir, disfrutamos de tantos y tantos beneficios al hacerlo.
Comparto a continuación un extracto de la maravillosa
alabanza a la naturaleza realizada en “El cántico de las criaturas de San
Francisco de Asís” (1):
…
Alabado seas, mi Señor,
en todas tus criaturas,
especialmente en el Señor hermano sol,
por quien nos das el día y nos iluminas.
Y es bello y radiante con gran esplendor,
de ti, Altísimo, lleva significación.
Alabado seas, mi Señor,
por la hermana luna y las estrellas,
en el cielo las formaste claras y preciosas y bellas.
Alabado seas, mi Señor, por el hermano viento
y por el aire y la nube y el cielo sereno y todo
tiempo,
por todos ellos a tus criaturas das sustento.
Alabado seas, mi Señor, por el hermano fuego,
por el cual iluminas la noche,
y es bello y alegre y vigoroso y fuerte.
Alabado seas, mi Señor,
por la hermana nuestra madre tierra,
la cual nos sostiene y gobierna
y produce diversos frutos con coloridas flores y hierbas.
…
Querer nuestra naturaleza significa cuidarla y darle
los espacios y no simplemente querer controlarla, lo que no podemos y sólo lo lograremos hacer
temporalmente.
Nos sensibilizamos cuando pasa lo del calentamiento
global, al sufrir de
considerables cambios en el clima y de grandes inundaciones y de incendios que hacen
mucho daño. Quizás sean acomodos de la naturaleza para llegar a nuevos
equilibrios, debido a nuestras intervenciones desmedidas que hemos realizado.
Este año que termina su ciclo no ha sido la excepción,
hemos recibido innumerables regalos, pero también variadas enseñanzas. Y
lamentablemente a veces las enseñanzas nos han generan tristezas, penas y
dolor.
Nuestros próximos desafíos son poder interpretar,
sensibilizarnos, aprender y poder aplicar las enseñanzas y así convertirlas en
regalos.
Un abrazo,
Referencia:
(1) Citado en: “El cántico de las criaturas de San
Francisco de Asís”, https://www.aciprensa.com/recursos/el-cantico-de-las-criaturas-1289, consultado 30 diciembre 2020.
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