Cuentan
que una vez un hombre caminaba por la playa en una noche de luna llena. Pensaba
de esta forma:
"Si
tuviera un auto nuevo, sería feliz"
"Si
tuviera una casa grande, sería feliz""Si tuviera un... excelente trabajo, sería feliz"
"Si tuviera pareja perfecta, sería feliz".
En
ese momento, tropezó con una bolsita llena de piedras y empezó a tirarlas una
por una al mar cada vez que decía: "Seria feliz si tuviera....".
Así
lo hizo hasta que solamente quedaba una piedrita en la bolsa, la cual guardó.
Al llegar a su casa se dio cuenta de que aquella piedrita era un diamante muy
valioso.
¿Te
imaginas cuántos diamantes arrojó al mar sin detenerse y apreciarlos?
Cuántos
de nosotros pasamos arrojando nuestros preciosos tesoros por estar esperando lo
que creemos perfecto o soñando y deseando lo que no se tiene, sin darle valor a
lo que tenemos cerca.
Mira
a tu alrededor y si te detienes a observar, te darás cuenta cuán afortunado
eres, muy cerca de ti está tu felicidad, y no le has dado la oportunidad de
demostrarlo.
"La
felicidad no depende de lo que nos falta, sino del buen uso que hacemos de lo
que tenemos"
Referencia:
Citado
en: www.facebook.com / PALABRAS PARA EL
ALMA/ 15 Agosto 2013.
No hay comentarios:
Publicar un comentario