Conversemos de Felicidad

Cada día nos sensibilizamos más de la palabra “felicidad”, a pesar de nuestra poca claridad en su definición y de la baja evolución desde tiempos inmemoriales, siendo la clave el entender que somos seres que coexistimos en más planos que sólo el material. Y que en cada uno de los planos existen principios y actividades que nos pueden ayudar a mejorar nuestro nivel de felicidad.

¿Sólo basta hablar de felicidad?.

Cada día se habla más de la felicidad, en diferentes medios y lugares, lo que es muy bueno. Pero existe la incertidumbre si las personas que lo escuchan están entendiendo y si están del todo interesadas en la felicidad.

¿Porque no se entiende la felicidad?

No es un tema sencillo debido a que no se tiene una definición clara de la felicidad y es percibida por cada una de las personas de manera distinta, de acuerdo a su propia esencia.

De la lenta evolución, desde la época de las cavernas, nuestros organismos, nuestras mentes y nuestros sentimientos no han cambiado del todo desde aquel portentoso hombre cavernícola que realizaba funciones muy diferentes a las actuales. En nuestra época seguimos cargando funciones “cavernícolas” en nuestro comportamiento. Por ejemplo antes se tenía miedo de los depredadores… hoy seguimos con miedos y lo que ha cambiado son los depredadores.

Los dos elementos comentados, hacen que no siempre estemos interesados en el tema de la felicidad y en muchos casos simplemente se considera que es aplicable sólo para algunas personas y la percepción es que la felicidad es para aquellos que tienen el dinero para darse la gran vida.

¿Cómo podemos mejorar nuestra percepción de la vida?

Hay evidencias de un mejor entendimiento de la vida, esencialmente al percibir que el ser humano no sólo tiene una existencia física. Como se dice: “no sólo de pan vive el hombre”.

Creo que el mejor punto de partida es considerar que somos seres que coexistimos en diferentes planos de la vida. Desde el plano espiritual residente en nuestra alma y que orienta nuestra razón de existir. Siguiendo por el plano mental que está radicado en nuestro cerebro y que tiene que ver con el tipo de pensamiento que tenemos. Continuando por el plano emocional, ubicado en nuestro corazón y que dice relación con nuestras actitudes frente a la vida. Y terminando por el plano físico, localizado en nuestro cuerpo, que es el más visible y que es la entrada de nuestro mundo físico a nuestros planos más profundos y menos visibles como los mencionados primeramente.

Si bien la separación de los planos facilita nuestro entendimiento, no es fácil distinguirlos, lo que irá mejorando con el tiempo al ir avanzando en las investigaciones y sobre todo conociendo sus interacciones entre estos.

Lo claro es que debemos entender que no sólo existimos en el plano físico, aunque sea el más visible y que nuestros sentidos nos hacen percibirlo como el más real.

Principios en cada uno de los planos

Las investigaciones cada vez muestran que la significancia de los planos es inversamente a su visibilidad. Esto lo podemos percibirlos comparando el “poder” de los principios que rigen en cada uno de los planos.

En el plano físico podemos indicar la ley de la gravedad y que todos percibimos su poder sobre todo si no lo tenemos en cuenta por ejemplo al querer saltar de pisos superiores de un edificio.

En el plano emocional es importante la ley de las relaciones y que se manifiesta en que “sólo las relaciones producen” y que de alguna manera refleja la relevancia de las relaciones entre los seres humanos.

En el plano mental está la ley de la atracción, que dice relación con la gran influencia que tienen nuestros pensamientos en nuestras vidas, que hoy nos sensibilizamos con el principio de “todo es mente”.

En el plano espiritual es fácil indicar el poder de nuestras creencias y es muy conocido el principio de “la fe mueve montañas”.

Principios de la Felicidad

En el contexto de la felicidad, también existen principios, los que pueden asociarse a los diferentes planos en que coexistimos.

Algunos de los principios son:

Plano Físico

Para Ser Feliz hay que Trabajar y Disfrutar.

Plano Emocional

Para ser Feliz hay que Servir.

Plano Mental

Para ser Feliz hay que Definir Ser Feliz.

Plano Espiritual

La Felicidad está en nuestro Interior.

Actividades que mejoran la Felicidad

En cada uno de los planos podemos llevar a cabo actividades que contribuirán a nuestra felicidad.

Algunos de los ejemplos más conocidos.

Plano Físico

Placeres – Disfrutar de los placeres de la vida.

Plano Emocional

Relaciones – Tener buenas relaciones con los familiares y amigos.

Plano Mental

Pensamiento Positivo – Pensar siempre que todo saldrá bien.

Plano Espiritual

Gratitud – Agradecer siempre todos los regalos dados por nuestro Padre Creador.

La invitación es seguir hablando de la felicidad cada día más, logrando una mayor sensibilización al practicar los principios y sobre todos al realizar las actividades mencionadas, que le permitirán mejorar su nivel de felicidad.

Un Abrazo,

Víctor Hugo Ramón Vergara Medina

Ingeniero, Magister Ciencias y Entrenamiento en Silva Mind Control

Relator del “Taller de la Felicidad”

Director de Blogs sobre la “Felicidad” http://prisma101-1.blogspot.cl/

Correo vvergara101@gmail.com

Referencia:

-      Imagen obtenida de: http://espaciodelafelicidad.blogspot.cl/, consultado el 31 marzo 2017.