A
continuación un artículo que explica como el desapego nos puede ayudar a
entender y mejorar nuestro nivel de Felicidad:
Sólo tú, puedes
hacerte feliz y todos los momentos presentes lo son porque tú estás en ellos.
Y hoy, en el eterno presente, en el aquí y el ahora, tú serás feliz aunque hoy
te acompañe esto o lo otro. Y podrás ir pasando de un momento a otro en la vida
disfrutándolo plenamente, sin llevar cargas emocionales del pasado. Y como los
lirios del campo y los pájaros del cielo estarás libre de preocupaciones
viviendo siempre el Eterno presente.
Buda
dijo:
“El
mundo está lleno de sufrimientos; la raíz del sufrimiento es el apego; la
supresión del sufrimiento es la eliminación del apego”.
El
desapego podría definirse como "carencia de sed". Piensa en el ánimo
de una persona desesperada por la sed y en el de alguien que no la tiene.
Observa mentalmente la diferencia. ¿En cuál ves paz, tranquilidad, seguridad y
en cual lo contrario? Ahora observa el mundo, la infelicidad que hay en torno y
dentro de ti. ¿Qué la causa? La situación económica, el desempleo, las guerras,
la soledad...
Si
observas bien, verás que no es nada de esto, porque si esto se solucionara
aparecerían otros temas que seguirían causando la infelicidad. ¿Entonces qué
es?. Es que esa infelicidad la llevas contigo donde vayas. Esa infelicidad está
en ti y no puedes escapar de ti. Está en tu programación, en tu computadora
cerebral, son tus creencias; esas que te parecen tan lógicas que ni siquiera
sabes que te tiranizan y esclavizan.
Tu mente no deja de
producir infelicidad. Ahora, si lo analizas, verás que hay una sola cosa que
origina la infelicidad: el deseo-apego.
¿Y qué es el apego?
Es
un estado emocional de vinculación compulsiva a una cosa o persona determinada,
originado por la creencia de que sin esa cosa o persona, no es posible ser
feliz.
Tu
mente dice: No puedes ser feliz si no tienes tal o cual cosa, o si tal persona
no está contigo. No puedes ser feliz si tal persona no te ama. No puedes ser
feliz si no tienes un trabajo seguro. No puedes ser feliz si no das seguridad a
tu futuro. No puedes ser feliz si estás solo. No puedes ser feliz si no tienes
un cuerpo a la moda. No puedes ser feliz si los otros actúan así. Y cuantos más
'No puedes ser feliz si....'
Tu mente está
programada para demostrarte constantemente (si no es por una cosa, es por otra)
que no puedes ser feliz. ¡Todo esto es falso!
Tú eres feliz aquí y
ahora; pero no lo
sabes, porque tus falsas creencias y tu manera deformada de ver las cosas
te han llenado de miedos, de preocupaciones, de ataduras, de conflictos, de culpabilidades...
Si lograras ver a través de esa maraña, comprobarías que eres feliz y no lo
sabes.
No hay un solo
momento en tu vida en el que no tengas cuanto necesitas para... Ser Feliz. Todas
las cosas a las que te apegas, y sin las que estás convencido que no puedes ser
feliz, son simplemente tus motivos de angustias. Lo que te hace feliz no es la situación que te rodea, sino los
pensamientos que hay en tu mente…
El
apego es un estado emocional que tiene dos puntas, una positiva y otra
negativa. La positiva es el estado de placer y la emoción que sientes cuando
logras aquello a que estás apegado. La negativa es la sensación de amenaza y la
tensión que lo acompañan, lo que te hace vulnerable al desorden emocional y
amenaza constantemente con hacer añicos tu paz.
Observa bien: Si no
se consigue el objeto del apego, origina infelicidad; y si se lo consigue solo
produce un instante de placer seguido de la preocupación y el temor a perderlo.
¿Podemos ganar la
batalla contra los apegos?
Si,
renunciando a ellos. Cambiando nuestra programación.
Haz
una lista de todo lo que te tenga apegado y dile a cada una: "En realidad
no estoy apegado a ti en absoluto. Tan solo estoy engañándome a mí mismo
creyendo que sin ti no puedo ser feliz"
Y
si tu apego se refiere a una persona di:
"Te
dejo que seas tú mismo; que tengas tus propios pensamientos, que satisfagas tus
propios gustos, que sigas tus propias inclinaciones, que te comportes tal como
decidas hacerlo. Te libero con Amor y me libero con Amor"
Ahora
estás en condiciones de amar a esa persona. ¿Por qué? Porque Amar, no es
querer. Lo que quieres, quieres poseerlo. Cuando quieres a alguien para ti,
solo le estás poniendo una cadena al cuello, y estás atándote del otro lado.
El
Amor solo puede existir en libertad. Elige entre tu apego y la felicidad. Lo
que necesitas no es renunciar, sino comprender, tomar conciencia. Si tus apegos
te han ocasionado sufrimiento, esa es una gran ayuda para comprender, y si
alguna vez experimentaste el sentimiento de libertad te será útil recordarlo.
Borra en ti el ¡que feliz me haces! y el ¡esto me hace feliz!
Sólo tú, puedes
hacerte feliz y todos los momentos presentes lo son porque tú estás en ellos. Y
hoy, el eterno presente, el aquí y ahora, tú serás feliz aunque hoy te acompañe
esto o lo otro. Y podrás ir pasando de un momento a otro en la vida,
disfrutándolo plenamente, sin llevar cargas emocionales del pasado. Y como los
lirios del campo y los pájaros del cielo estarás libre de preocupaciones
viviendo siempre el Eterno presente.
¿De dónde llegó tu
apego?
Brotó
de una mentira que llega desde tu cultura, tu sociedad, o desde tu mismo, o sea
de tu programación. Simplemente observa: miles de personas viven sin eso que tú
supones dueño de tu felicidad; y si revisas tu pasado encontrarás algo que en
un momento dado supusiste insustituible, y que el tiempo te demostró que no era
así. Hoy ya ni las recuerdas. ¡Mira que pequeñas eran!.
El cambio se produce
únicamente cuando unes el conocimiento a la comprensión; observa que son las
columnas del Altar de la Sabiduría. La clave: Desprogramarse, soltar las
ataduras.
¿Qué es tu
programación?
Eso
que llevas dentro de tu computadora cerebral, que se formó acumulando los datos
recibidos. Tu cultura, tus ideas, tus creencias, tus miedos, tus apegos, tus
hábitos.
He
aquí los nombres de los muros de tu prisión, he aquí los nombres de la maraña
que filtra toda la información que te llega. Analízalos uno por uno, ya que el
camino no es renunciar, ni poner fuerza de voluntad. No combatáis el mal... El
camino es la visión, agrandar el bien contrario.
Tu
cultura:
Sea
la que fuere, hay otras culturas diferentes, hay otras personas que viven
perfectamente sin ella, por lo tanto no es la única. No es la dueña de la
verdad.
Tus
ideas:
Cuando
conoces a alguien, lo etiquetas. Para ti es simpático, o desagradable, o
triste, o tonto. Pues, eso seguirás viendo en esa persona ya que esa es la idea
que tienes de esa persona.
Tú
ves a las personas, no como son, sino de acuerdo a la idea que tienes de ella.
Sin embargo, otras personas pueden tener una idea diferente a la que tú te
hayas hecho, por lo tanto tampoco es la única infalible o valedera. Esto vale
no solo con respecto a las personas, sino que involucra a todas tus ideas.
Tus
creencias:
Actúas
como un fanático cerrado a todo lo que pueda poner en tela de juicio tus
creencias. ¿Te asusta el fanatismo en otro?, pues eso es lo que nos hacen ser
nuestras falsas creencias. Observa las consecuencias de los fanatismos
extremos, ellos se basan en creencias tan arraigadas que no permiten la entrada
de otras opiniones diferentes.
Tus
miedos:
Si
supieras que van a matarte, no podrías dejar de pensar en eso. Esto hace tus
miedos, fijan tu mente solamente en ellos. Y si tienes tu mente fija en ellos,
no vives tu vida, no puedes ser feliz, nada habrá que pueda alegrarte, verás
todo desde el lado más oscuro. Esta no solo es la peor de las ataduras, sino
que es la puerta por donde entra todo lo negativo. La energía sigue al
pensamiento, si tu pensamiento es un constante negativo, como podrían
manifestarse en tu vida cosas bellas. Si tu mente se revuelca en un laberinto
de terror, es eso lo que lamentablemente atraes para ti; luego ella se encarga
de hacerte ver que aquello malo que temías, ha sucedido. Lo que no te dice es
que ella lo ha creado con sus pensamientos. El miedo hace la combinación
perfecta para llevar a la manifestación lo que temes; ya que combina
pensamiento, sentimiento y palabra. Cierra esta puerta oscura y abre la del
Amor con todo tu corazón, ya que el Amor es lo contrario al temor, llénate de
Amor y poco a poco tus temores irán perdiendo fuerza.
Tus
apegos:
Como
un avaro cuidando su dinero, fingirás no ver más que lo que pone en peligro tus
apegos. Recuerda que son el motivo del sufrimiento. Si le preguntamos a alguien
si le gusta sufrir, con seguridad contestará que no. Y si ya sabemos cuál es el
motivo del sufrimiento tratemos de no darle poder a nada externo a nosotros.
Tus
hábitos:
Tienes
costumbres, formas que de tanto hacerlas son habituales y lógicas para ti. Es
tu parte-robot, que sirve para realizar actos mecánicos, pero no, para
enjuiciar a la vida.
Como
ves:
El mundo con el que
te relacionas y al que amas, es un mundo creado por tu propia mente y tiene muy
poco que ver con el mundo real, ¿por qué no crear
con tu propia mente tu mundo de LUZ ? La clave es comprender y tomar
conciencia. Entonces todo lo que te esclaviza se va a ir desmoronando, va a ir
perdiendo poder en ti y tu propia creatividad va a ir reemplazando al robot
mecánico, rígido y falto de vida que eras. Ya no vas a admirar a una flor
porque la sabes bonita, sino vas a poder penetrar la esencia de todas las flores.
Y no vas a ver el mar, como un pescador de forma mecánica, sino como la belleza
y grandeza que le ofrece a tu vista.
Solo en la medida en que seas capaz de ver a
alguien tal como realmente es, aquí y ahora, no tal como es en tu memoria, en
tu deseo y en tu imaginación. Sólo así podrás realmente amarla
Tu mente, tu cultura,
tus creencias...
Anthony
de Mello las ilustra perfectamente: Una turista occidental contemplaba, llena
de admiración, el collar de una nativa. "¿De qué está hecho? ", le
preguntó. "De dientes de caimán, Señora", respondió la nativa.
"¡Ah, ya!. Supongo que los dientes de caimán tendrán para ustedes el mismo
valor que para nosotros tienen las perlas... "¡En absoluto!. Una ostra
puede abrirla cualquiera."
Como
puedes observar, las distintas culturas y ubicaciones hacen diferentes los
valores, por lo que ningún valor que dependa de lo externo es real y absoluto.
Los que han alcanzado la iluminación comprenden que un diamante no es más que
una piedra a la que la mente humana ha dado valor. Y que los reyes son lo
grandes o lo pequeños que tu mente decida que sean. Y que todo tiene el valor
que tú le das...
La felicidad y la
desdicha dependen de cómo afrontemos los acontecimientos, no de la naturaleza
de los acontecimientos en sí (Anthony de Mello)
Redescubrirte
a ti mismo, es simplemente redescubrir la Vida en plenitud que puedes alcanzar,
si te propones eliminar las rejas que tú mismo te pusiste.
"La
Nueva Era requiere nuevos hombres. Y el Nuevo Hombre surge del reencuentro
consigo mismo. Surge al rellenar el abismo que os separa de la Realidad. Surge
por la fuerza apelativa del Amor. Surge por el esfuerzo reintegrativo en un
Todo Mayor".
"La energía sigue al pensamiento. Por eso
los que creen en cosas equivocadas, igual que los que creen solamente en lo que
es limitado a sus vidas, reivindican para sí mismos la prisión
espiritual..."
Referencia:
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