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domingo, 27 de diciembre de 2015

Si quieres sentirte más Feliz, ¡baila!


A continuación Teresa Morales, nos entrega las ventajas de bailar, son tantas e importantes que debemos hacer de la vida un baile.

Nos dice:

¿Te gusta bailar? entonces seguro que te has adelantado a la ciencia y ya tienes claro hace tiempo que movernos al ritmo de la música nos hace más felices, aun así no está nada mal que nos lo confirmen y conocer todos sus beneficios. Si buscas una excusa para bailar un rato cada día y sentirte bien, hoy vas a poder leerlas todas:

Adiós estrés, hola autoconfianza

No importa si tenemos más o menos gracia, cuando danzamos liberamos endorfinas (las llamadas “hormonas de la felicidad”), que mejoran nuestro estado de ánimo. Algo que también nos proporciona el ejercicio, pero según explicaron en Psychology Today, bailar de forma regular nos ayuda mejor que el deporte a relajarnos y a tener una mayor sensación de control.

Esto nos encamina a calmar los nervios y así lo comprobaron en un estudio realizado por la Universidad de Nueva Inglaterra, en el que encontraron que tomar clases de tango bajaba más el nivel de estrés de los participantes que practicar yoga o meditación.

Emociones positivas, dominio del cuerpo, menos ansiedad… No es de extrañar que el baile contribuya también a mejorar la confianza en nosotros mismos, algo que afirma un estudio con adolescentes realizado en Suecia, en él se observó que las chicas que asistían a clases semanales de baile tenían más autoestima.

Conclusión: estamos más tranquilas, más seguras y más happy.

Muchas otras cosas buenas

Bailar es una actividad aeróbica estupenda, con ella quemamos calorías, tonificamos los músculos y mejoramos la coordinación, una combinación perfecta para mantenernos en forma. Además contribuye a que mejoremos nuestra postura corporal (imprescindible cuando nos pasamos media vida sentados) y trabaja la flexibilidad y fortalecimiento de las articulaciones.

Cuerpo sano y mente todavía más sana, ya que bailar es una forma de prevenir el envejecimiento cerebral. Según una investigación publicada en New England Journal of Medicine, bailar disminuye el riesgo de demencia en la tercera edad en un 76%, mientras que realizar crucigramas solo lo hace en un 47%.

Tampoco hay que desmerecer otras propiedades positivas como que es divertido, nos causa placer y amplía o refuerza nuestras relaciones sociales cuando salimos a bailar con más gente.

¡A darlo todo!

Podemos apuntarnos a una academia, bailar con o sin compañía, abonarnos a un local de salsa (bachata, merengue o lo que surja) y hacernos incondicionales de la clase de zumba del gimnasio. Todas las opciones son válidas, aunque no hay que olvidar que a veces puede ser algo tan sencillo como poner una canción que nos motive, subir bien el volumen, ¡y bailar!, eso sí, en cualquier caso siempre dándolo todo.

Y es que, como decía el bailarín Hans Bos:

“Mientras bailo no puedo juzgar. No puedo odiar, no puedo separarme de la vida. Solo puedo estar alegre y entero. Es por ello que bailo”.

Pues venga, bailemos.

Referencias:
-      Citado en: Teresa Morales, “Si quieres sentirte más feliz, ¡baila!”,  http://belleza.trendencias.com/psicologia/si-quieres-sentirte-mas-feliz-baila, 19 Noviembre 2015.

sábado, 26 de diciembre de 2015

Alimentos que producen Felicidad

A continuación extracto del artículo de Azteca Noticas, que menciona algunos de los alimentos que nos hacen felices:
 
Se indica:
 
Especialistas en neurociencia de la Universidad de Bristol presentaron un estudio en donde se explica que hay ciertas carnes, lácteos, verduras y frutas que aceleran la producción de endofrinas y serotonina, las cuales regulan el ánimo, el sueño y el apetito.
 
Una dieta balanceada ayuda y en ella tendrían que encontrarse los siguientes alimentos:
 
Piña
 
Es rica en minerales, vitaminas y elementos que estimulan la producción de serotonina. Es una excelente fuente de azúcares naturales, por lo que mejora el funcionamiento del cerebro. Además, contiene una gran cantidad de antioxidantes.
 
Chile (Ají)
 
Suele producirnos mucho ardor, pero tiene una sustancia llamada capsaicina que estimula las terminaciones nerviosas de la boca y genera al mismo tiempo endorfinas en el cerebro.
 
Espárragos
 
Estos vegetales contienen altas cantidades de ácido fólico y triptófano. El segundo es utilizado por el cerebro para producir serotonina. De hecho, estudios científicos refieren que hay una relación entre los niveles bajos de folato y la depresión.
 
Chocolate
 
Históricamente es considerado el afrodisiaco perfecto, eso es porque es el máximo productor en alimentos de endorfinas y serotonina. De ahí que se le considere antidepresivo y tenga el estatus de aligerar las penas cuando estamos tristes. Además, contiene feniletilamina, que produce en el cuerpo el mismo efecto que el enamoramiento.
 
Plátano
 
La llamada “fruta de la felicidad” es uno de los alimentos que más energía aporta al organismo. También es una poderosa fuente de triptófano, la cual genera serotonina, responsable del buen humor y la felicidad.
 
Referencias:
-      Citado en: Azteca Noticias, “Alimentos que producen felicidad”, http://www.aztecanoticias.com.mx/notas/salud/236661/alimentos-que-producen-felicidad,  24 Noviembre 2015.
-      Imagen obtenida de: http://www.estoespurpura.com/8-alimentos-que-dan-felicidad/, 26 Diciembre 2015.

jueves, 24 de diciembre de 2015

Navidad es Felicidad

¿Qué es la Felicidad?
Muchas definiciones se dan
Para un cristiano es muy simple:
Es Amor que Dios nos da.
 
Estamos celebramos algo especial
Que ninguna persona olvidará
Todos los años lo esperamos
Jesús Nacerá y Amor nos traerá
 
Si… Amor nos traerá
Amor que es el combustible vital
Que es la energía esencial
Que sustenta nuestra Vida y Felicidad.
 
A disfrutar de un rico chocolate…
De un gran abrazo a un ser querido dar
Pensar que podemos ser felices si nos lo proponemos
De siempre tener Gratitud a Dios que la vida nos da.
 
Tan simple que pequeñas cosas nos dan una gran felicidad.
Pero eso dependerá de nuestra individualidad
Para cado uno y todo ustedes…
Que tengan una ¡Feliz Navidad!
 
 
Referencia:
Para Prisma 101 de Víctor Hugo Ramón Vergara Medina, 24 Diciembre 2015.

jueves, 17 de diciembre de 2015

Es unánime: en la vida hay que ser Feliz


A continuación extractos del artículo de Guillermo Orts-Gil, que nos entrega una reflexión sobre la coincidencias de la ciencia de la felicidad y la sabiduría de vivir

Sobre la Sabiduría de la Vida
La sabiduría de la vida la indica Orts-Gil a través de lo expresado por dos personajes importantes para él.

Uno es su sobrino de doce años, que al preguntarle lo que él quería ser de mayor, obtuvo la respuesta de: “yo de mayor quiero ser feliz”.

Orts-Gil reflexiona:

¡Toma ya, cuánta sabiduría en tan pocas palabras! Porque, para ser sinceros, el conocimiento, el pensamiento, la ciencia, el arte o la introspección, son elementos que pueden resultar enriquecedores pero, ¿qué valor tiene todo esto comparado con ser feliz?

El otro, es Oliver Sacks, neurólogo, científico y escritor, que dejó una carta de despedida poco antes de morir, en la que mencionaba: "el sentimiento que predomina en mí es la gratitud. He amado y he sido amado; he recibido mucho y he dado algo a cambio; he leído, y viajado, y pensado, y escrito".

Guillermo Orts-Gil comenta:

Pues bien, las palabras de Oliver Sacks parece que coinciden con lo que nos dicen algunos estudios científicos: la felicidad no consiste en acumular cosas, sino más bien experiencias. Y esto coincide también, con los que les explicaba en otro artículo: muchas personas a punto de morir de lo que se arrepienten es no haber intentado ser más felices, de no haber dedicado más tiempo a lo que les gustaba, de no haber perseguido más sus sueños.

Parece que Sacks sí persiguió los suyos y estaba agradecido a la vida. Precisamente, estudios recientes sugieren que las personas que son agradecidas, son también más felices.

Lo que yo me cuestiono aquí es: ¿puede la ciencia realmente decirnos dónde se encuentran las claves de la felicidad?

¿Cuándo y dónde reside la Felicidad?
Por supuesto, muchos de ustedes pensarán que la felicidad solo puede ser cosa del presente: vivimos y disfrutamos el momento, carpe diem. ¿Pero es esto de verdad así? ¿A quién no se le ha escapado una sonrisa al recordar uno de los buenos momentos pasados? ¿Y quién no se ha sentido feliz alguna vez al imaginarse ciertos acontecimientos futuros?

Según el premio Nobel Daniel Kahneman, conviven en nosotros varios 'yo', cada uno de ellos feliz a su manera. Kahneman los denomina el 'yo de ahora' y el 'yo que tiene experiencias'. Mientras el primero siente felicidad por las cosas que disfruta en el momento, el 'yo que tiene experiencias' lo que busca es vivir cosas que, aunque no le apetezcan especialmente en ese momento concreto, sabe que le van a reportar recuerdos que podrá recordar felizmente, en el futuro. O sea que, una posible interpretación sería: la felicidad vive, a la vez, en el pasado, en el presente y en el futuro.

Y esta conclusión puede darnos una posible respuesta a la pregunta a la que estoy dando vueltas desde el principio de este artículo: ¿qué quieres ser de mayor?

Cada uno lo podrá interpretar como quiera, para mí la respuesta de un chico de doce años podría dar en el clavo: de mayor quiero ser feliz. Y me atrevo a aventurar que ésa es la respuesta que solo puede dar alguien que conoce la felicidad, alguien que la ha sentido en el pasado. Pero más aún, es la respuesta inteligente de alguien que es consciente de que la felicidad del ahora, puede ser también la del futuro.

Sobre la ciencia de la Felicidad
Tal vez la ciencia nos vaya ayudando a entender, cada vez mejor, qué es la felicidad y en qué momento reside. Pero, en cualquier caso, asumiendo que existe el libre albedrío, seguirá dependiendo de nosotros el intentar buscarla.

Cada uno puede y, tal vez incluso debe, tener sus propios sueños. Ignoro cuáles son los suyos. Como les contaba antes, el mío es ser llegar a ser algún día un poco sabio, ojalá, un filósofo de la ciencia. El ejemplo de un chico de doce años llamado Jan me lleva a pensar que hay sabios de la felicidad que no necesitan conocer la ciencia que se esconde tras ella. Y las palabras de un anciano Oliver Sacks me llevan a pensar que el estar agradecido a la vida, cuando estamos a punto de abandonarla, puede ser un claro síntoma de una vida plena, feliz.

Por todo esto, gracias a la sabiduría de un chico y de un abuelo, ahora entiendo un poco mejor lo que de verdad quiero llegar a ser en el futuro. Yo de mayor también quiero ser feliz.

Referencias:
-      Citado en: Guillermo Orts-Gil, “La ciencia de la felicidad y la sabiduría de vivir”, http://www.huffingtonpost.es/guillermo-orts-gil/ciencia-de--la-felicidad_b_8404986.html, 13 Noviembre 2015.
-      Imagen obtenida de: http://es.dreamstime.com/imagen-de-archivo-camino-al-cielo-image4956721, 17 Diciembre 2015.

jueves, 10 de diciembre de 2015

Felicidad y gratitud

A continuación se transcribe el artículo de Ismael Cala, sobre la relación existente entre la gratitud y la felicidad.
 
Se indica:
 
Un proverbio chino, cuyo propósito es resaltar el deber de ser agradecidos, reza: “Cuando bebas agua, recuerda la fuente”. La gratitud es una de las virtudes más hermosas del ser humano. No existe libro sagrado que no destaque su nobleza: la Biblia, el Corán y los textos judíos y budistas, por solo mencionar algunos.
 
Si algo sostienen en común esas escrituras, es la necesidad de agradecer siempre a la naturaleza, a nuestros semejantes y fundamentalmente a Dios, por todo lo que recibimos a diario. Pero, sobre todas las cosas, por la vida. ¡Solo vivir es motivo para agradecer!
 
La gratitud está relacionada con la felicidad. Hay quienes dicen que ser feliz es muestra de agradecimiento, pero en realidad es a la inversa. Según el monje católico benedictino David Steindl-Rast, “es la gratitud la que nos hace felices”.
 
Steindl-Rast pide profesar siempre gratitud, consciente de que “cada momento es un momento dado… es un regalo, no lo hemos ganado, no lo conseguimos de ninguna manera, se nos otorga. Además, no tenemos asegurado que habrá otro momento como este”. Por tanto, agradezcamos el ahora y la oportunidad que nos brinda para luchar por los sueños. “Si no tuviéramos este momento presente, no tendríamos oportunidad de hacer nada”.
 
Un mundo agradecido es un mundo de gente alegre”, asegura Steindl-Rast. Es sorprendente cuánto bienestar y mutua alegría genera un gesto de agradecimiento o la sencilla palabra “gracias”, pronunciada con sinceridad, a quien nos brinda su apoyo material o espiritual, sin esperar nada a cambio. Servir y agradecer son virtudes que alinean a los seres humanos, solo superadas por el sentimiento del amor cuando es correspondido.
 
A Dios le mostramos agradecimiento orando y reconociendo su grandeza; a la naturaleza, cuidándola, sumergiéndonos y disfrutándola; a nuestros semejantes, con gestos sencillos y frases sinceras, preferiblemente de manera personal y hasta por escrito.
 
No dudemos en hacer público nuestro agradecimiento y utilizar incluso las redes sociales. Es loable hacerlo en estos momentos, cuando la espiritualidad a veces escasea y el hombre realiza acciones nada dignas de ser agradecidas, como las guerras y la destrucción del medioambiente.
 
En este mundo, los seres humanos de bien, que somos la mayoría, estamos obligados a obrar siempre por el bienestar de los demás, persuadidos de que podemos olvidar cuando servimos, pero nunca cuando nos sirven a nosotros.
 
Referencias:
-          Citado en:  Ismael Cala, “Felicidad y gratitud”, http://www.elnuevodiario.com.ni/variedades/375762-felicidad-gratitud/,  04 Noviembre 2015.
-          Imagen obtenida de: https://www.pinterest.com/pin/483925922432459533/, 10 Diciembre 2015.

lunes, 7 de diciembre de 2015

La Felicidad en las sociedades actuales


A continuación un extracto del artículo de René Legue Cárdenas, que relaciona los aspectos de la felicidad en las sociedades actuales.

Se indica:

La permanente y constante búsqueda por la felicidad retrata un tema central en la vida de las personas, ¿Quién no quiere ser feliz?, ¿Quién no se ha preguntado alguna vez que significa ser feliz?, pues el deseo de ser felices es el gran llamado interior de todo ser humano, es un anhelo fundamental que, a diferencia de lo que ocurría hace algunas década atrás, hoy se aborda desde una mirada social, incluso se le considera un elemento constitutivo a la hora de medir el desarrollo de los países, pues no solo se considera el crecimiento económico, sino también, como mejorar la calidad de vida y dentro de ella, la búsqueda de la felicidad.

Desde el punto de vista económico, los indicadores de crecimiento han demostrado que no son suficientes para lograr la felicidad, no obstante ello, el crecimiento económico tiene un impacto en el desarrollo y en cómo los países salen de la pobreza, mejor dicho, a una persona de nivel socioeconómico bajo no le basta tener acceso a educación y a los bienes y servicios básicos que genera la economía para salir de su condición, sino que es fundamental, considerar los aspectos más sicológicos asociados a las motivaciones para dejar de ser pobres.

Por tanto, cuando medimos la economía y desarrollo del país a través del PIB, debemos también medir la felicidad a través del FIB (felicidad interna bruta), por lo que resulta obvio preguntarse las siguientes interrogantes: ¿Quién puede lograr sentirse feliz sino no se siente valorado por los demás?, ¿Quién está exento de la necesidad de afecto desde la primera infancia hasta los últimos días de su vida?, ¿Quién puede ser feliz sin el cultivo de las emociones positivas en su propia existencia, es decir, sentirse acogido, valorado y  reconocidos?.

En fin, es importante incorporar a nuestra vida diaria, ya sea en el lugar donde estemos y el rol que asumamos, la mirada de que la familia y el trabajo se complementan y enriquecen mutuamente. Las personas felices, además de tener resueltas sus necesidades básicas, cultivan actitudes positivas y hacen de su vida una tarea compartida, logrando sus retos en armonía y en cooperación con los demás.

Referencias:
-      Citado en : René Legue Cárdenas, “La paradoja de la felicidad en la sociedad del consumo”, http://www.eldivisadero.cl/redac-35462, 02 Noviembre 2015.
-      Imagen obtenida de: http://www.urosario.edu.co/revista-nova-et-vetera/Inicio/Cultura/La-felicidad-interna-bruta-como-elemento-director/, 07 Diciembre 2015.

miércoles, 2 de diciembre de 2015

El sendero de la Felicidad

A continuación de transcribe el artículo de la Arquidiócesis de Cali, publicado en www.elpais.com.co, que nos indica cual es el sendero de la felicidad.
 
Se nos dice:
 
Aunque todos somos distintos, nos identifica un mismo ideal: alcanzar la felicidad que tanto anhelamos en el fondo del corazón. Qué bueno que nos preguntáramos una vez más: ¿Soy feliz? ¿Qué he hecho y qué estoy haciendo para ser feliz?
 
Quizás tengamos que reconocer lo paradójico de nuestra existencia: aunque anhelamos la felicidad, a veces pareciera que no todo lo que hacemos nos sirve para conseguirla. Es cierto que muchas cosas escapan de nuestras manos, pero qué triste reconocer que también por culpa nuestra es que la felicidad no llega a nuestra vida.
 
La Palabra de Dios… es iluminadora pues nos hace caer en cuenta que la verdadera felicidad no la lograremos tanto por lo que hagamos o por lo que otros hagan, sino por lo que seamos. Si somos pobres de espíritu, es decir, si Dios es verdaderamente nuestro único tesoro; si somos misericordiosos, es decir, si tenemos un corazón sensible que nos lleve a acercarnos de corazón a las necesidades y miserias de los demás; si tenemos un corazón limpio, es decir, si nos mueve la sinceridad y el amor que brotan de un corazón lleno del amor de Dios, entonces, y sólo entonces, seremos realmente felices. Porque sentiremos la inmensa alegría de ir por el mundo dejando verdaderas huellas de amor y de eternidad.
 
Aunque muchos no quieran aceptarlo, la verdadera felicidad proviene sólo de Dios, porque Él es la fuente de todo don perfecto. Por eso la Bienaventuranza es prometida a quienes todo lo esperan de Dios y han entendido que Dios no los abandona, ni en la tristeza, ni en el llanto, ni en el sufrimiento, ni en el dolor, tampoco en la persecución o en la calumnia por causa de la justicia. Y es prometida a quienes, al gozar de la paz que sólo Dios nos puede dar, viven como verdaderos artesanos de la paz.
 
Este sendero de felicidad se identifica con el de la santidad. Dejémonos interpelar por él de manera especial en este día, en el que en la Iglesia celebramos la fiesta de Todos los Santos y se nos recuerda que todos somos llamados a la santidad.
 
Referencias:
-      Citado en: “El sendero de la felicidad”, http://www.elpais.com.co/elpais/opinion/columna/arquidiocesis-cali/sendero-felicidad, 31 Octubre 2015.
-      Imagen obtenida de: http://mi-gran-amor2.blogspot.cl/2013/02/mi-felicidad-proviene-de-dios.html, 02 Diciembre 2015.

La Felicidad se puede conseguir


A continuación extractos de la entrevista de Europa Press a la psicóloga Mila Cahue, que indica que la felicidad es una combinación perfecta de emoción y razón.

Se indica:

"Felicidad no es fácil ni es gratis, pero se puede conseguir", lo que hay que intentar, "es minimizar el sufrimiento innecesario", hay que conseguir que las equivocaciones sean una herramienta para lograr el equilibrio emocional que lleva al cerebro a ser feliz.

En contra de aquellos que evitan fijar la felicidad como el objetivo último de la vida, demuestra que en el equilibrio está la respuesta. "Los absolutos me fastidian bastante, la felicidad puede ser un objetivo, un proceso, una consecuencia, puede ser una decisiones. Que cada uno decida lo que quiere que sea la felicidad para él".

UN CEREBRO LLENO DE VIDA ES UN CEREBRO FELIZ

Cahue afirma que "en algún momento de la vida nos preguntamos qué vida estoy viviendo", y es la respuesta la que va a definir si existe ese equilibro; asimismo, "todos nacemos con habilidades que nos van a permitir la supervivencia"; y destaca que, a su juicio, "el gran reto de la vida es el autononocimiento".

Considera una necesidad aprender a identificar las emociones, "para ir adaptándonos a cada contexto del día", asimismo entiende que el cerebro tiene como objetivo ser feliz. "El objetivo del cerebro es su felicidad, y tenemos que aprender a cuidar el cuerpo fisiológicamente porque un cerebro lleno de vida es un cerebro feliz. En términos de biología el objetivo del cerebro es la supervivencia", recuerda.

"Todos los procesos se producen en el cerebro", advierte, recordado que debe darse una combinación perfecta entre emoción y razón. La parte emocional está relacionada con la ira, la tristeza, el miedo, la alegría y el amor; y la parte racional hace referencia a la atención, la percepción, la memoria y la intuición. "Esta combinación se consigue con una fundamentación sencilla: aprender a pensar bien es como aprender a conducir; si controlas aquello en lo que fijas tu atención, podrás controlar tu visión de la realidad".

Para todo esto, concluye, "es clave aprender a escuchar a nuestro organismo; aprender a no reaccionar en extremo; recuperara la paciencia y la capacidad de observación; ser generosos con nosotros mismos, y tener la capacidad de aprender de nuestros errores".

Referencias:
-          Citado en: EUROPA PRESS, La psicóloga Mila Cahue recuerda que "la felicidad no es fácil ni es gratis, pero se puede conseguir",  http://www.teinteresa.es/noticias/psicologa-Mila-Cahue-felicidad-conseguir_0_1459654061.html, 01 Noviembre 2015.