Mejorar la armonía a través de las “cuentas de felicidad”, la “inmunidad mental” e “higiene mental”, nos permitira un mayor nivel de felicidad.
Resumen:
La felicidad no sòlo son los aspectos más visibles como la alegría, sino que hay otros aspectos internos (no visibles), que cuando están en armonía se manifestan en nuestro cuerpo como la sonrisa, y en nuestro corazón como la alegría.
Para lograr esa felicidad integral, se tienen diferentes enfoques de los aspectos que debemos trabajar para lograrlo.
Se presentan tres enfoques:
- Las “Cuentas de la felicidad”, un equivalente de la cuenta bancaria, en todos los planos de coexistencia del ser humano (fisico, emocional, mental y espiritual).
- La “inmunidad mental” planteada por el Dalai Lama, que considera en aprender a evitar las emociones destructivas y a desarrollar las positivas.
- La “higiene mental”, que considera que al igual que se hace higiene en el cuerpo físico, se debe hacer en las emociones y el espíritu, en forma periódica.
Los planos de la vida (1):
Somos seres que no sólo habitamos en el plano físico (lo terrenal y visible), sino que tambien en los planos emocional, mental y espiritual.
Y como se ha mencionado en diferentes publicaciones anteriores sobre el Modelo Integral de la Felicidad (MIFE):
Plano Físico:
Plano base de nuestra vida terrena y está asociado principalmente a nuestro cuerpo e incorpora todos los aspectos externos de nuestro vivir.
Plano Emocional:
Está asociado al ámbito del sentir y tiene que ver con nuestro corazón.
Plano Mental:
Está asociado al ámbito del pensar y tiene relación con nuestro cerebro.
Plano Espiritual:
Está en el ámbito del creer y está asociado a nuestra alma.
En “Las cuentas de la Felicidad” (1), se indicaba la importancia de cuidar el estado de ciertas “cuentas” para mejorar nuestro nivel de felicidad:
“El conocido concepto de cuenta bancaría, que se aplica a los aspectos monetarios (plano físico), lo podemos usar también en los restantes planos en que coexiste el ser humano y hablar de cuenta emocional, cuenta mental y cuenta espiritual.
La importancia de manejar estos conceptos, es que nos permitirá lograr balances más positivos en las diferentes cuentas, y así contribuir a mejorar nuestro nivel de felicidad”.
El mejoramiento de las cuentas puede ser potenciado con el enfoque planteado por el Dalai Lama de la “inmunidad mental” que se debe lograr para ser feliz.
La inmunidad mental (2)
La inmunidad mental consiste en aprender a evitar las emociones destructivas y a desarrollar las positivas. Para ello, primero debemos comprender la mente en todos sus estados posibles, los pensamientos y las emociones que experimentamos a diario. Algunos de estos pensamientos y emociones son dañinos, tóxicos incluso, mientras que otros son sanos y curativos. Los primeros perturban nuestra mente y tienen un efecto devastador, los segundos nos colman de alegría.
Cuando entendemos esta realidad, nos resulta mucho más fácil gestionar la mente y tomar medidas preventivas. Así es como se desarrolla la inmunidad mental. Y del mismo modo que un sistema inmunitario sano y una constitución fuerte protege el cuerpo de virus y bacterias una mente más sana que hace que esta sea menos susceptible a los pensamientos y a los sentimientos negativos.
… Si disfrutas de una buena salud, los virus no pueden dañarte. En cambio, si tu estado general es más bien débil, hasta el virus más pequeño resulta peligroso. Del mismo modo, si tu salud mental está en buenas condiciones, cuando tengas algún contratiempo, este te afectará pero te recuperarás en seguida.Pero si tu salud mental no es buena, hasta el problema más pequeño te causará mucho dolor y sufrimiento. Tendrás miedo, estarás triste y preocupado, enfadado e irritable.
A mucha gente le gustaría poder tomarse una pastilla que haga desaparecer el miedo y la ansiedad. Pero eso es imposible. Debemos desarrollar la mente y cultivar la inmunidad mental. Son muchos lo que me preguntan por la mejor solución a un problema, la más rápida. De nuevo, es imposible. Puedes encontrar una solución rápida o la mejor solución posible, pero nunca ambas cosas a la vez. La mejor forma de enfrentar el sufrimiento es a través de la inmunidad mental, pero se necesita tiempo para desarrollarla.
En la linea señalada, se presenta a continuación un extracto del artículo de Paula López: “¿Quiere usted alcanzar la felicidad y vivir una vida plena?, que nos plantea la importancia de tener una “higiene mental”, consiste en lavar, podar, limpiar, purificar todo aquello que nos contamina.
Higiene mental (3):
La aceptación es el campo fértil donde se gesta la felicidad. Cuando se comprende que el sufrimiento es el mejor maestro, es la maestría espiritual lo que libera del dolor emocional, pues lo lleva a entender que el sufrimiento siempre construye aprendizajey crecimiento.
Su alma recorre pasos sagrados para llegar a la madurez emocional, su corazón se agrieta cuando lo rompe el dolor, es entonces cuando su corazón está listo como terreno arado para ser sembrado, pues el terreno debe estar roto y blando para que cuando caiga la semilla, esta dé fruto. En un corazón duro como piedra, cubierto por el caparazón del ego no entraría la semilla.
El alma llora, y esas lágrimas son el riego del quebranto que abonan el corazón, en donde está penetrando la semilla para que nazca el fruto. Luego en medio de este proceso de gestación, debe regar la semilla. El riego es la oración, la contemplación, la meditación o el silencio interior, cada uno de estos caminos elegidos por cada ser, se convierten en el riego sagrado que nutre la metamorfosis del alma.
Así como usted hace higiene con su cuerpo físico, también su espíritu y su cuerpo emocional necesitan una higiene periódica.Esta consiste en lavar, podar, limpiar, purificar todo aquello que lo contamina. Imagine que usted pasa días, semanas, meses y hasta años sin bañarse, sin limpiar su cuerpo, sus dientes, su pelo. Su aspecto físico y el mal olor empiezan a destilar toda aquella contaminación bacteriana que va aumentando por falta de higiene. De igual manera sucede con su alma y sus toxinas emocionales acumuladas, si no las limpia ni las purifica, irán entonces contaminándolo y volviéndolo una persona tóxica que por ende construirá relaciones contaminadas con quienes lo rodean.
La manifestaciòn fisica de la Felicidad:
Sabemos que cuando los aspectos internos del ser humano que no son del todo visibles están en armonía, se presentan las manifestaciones en el plano físico (en nuestro cuerpo) como la sonrisa y la alegría.
Existen diferentes enfoques de los aspectos que debemos trabajar para lograr la armonía y la felicidad.
Hemos conocido tres enfoques que se potencian entre si:
ü Las “Cuentas de la felicidad”, un equivalente de la cuenta bancaria, en todos los planos de coexistencia del ser humano (fisico, emocional, mental y espiritual).
ü La “inmunidad mental” planteada por el Dalai Lama, que considera en aprender a evitar las emociones destructivas y a desarrollar las positivas.
ü La “higiene mental”, que considera que al igual que se hace higiene en el cuerpo físico, se debe hacer en las emociones y el espíritu, en forma periódica.
El trabajar los elementos señalados, nos permitirá una mayor armonìa, lo que se traducirá en el mejoramiento de nuestro nivel de felicidad.
Un Abrazo,
Referencias:
(2) Citado en: Dalai Lama y Desmond Tutu, "El Libro de la Alegría", Pinguin Random House Grupo Editorial S.A., Santiago, Chile, pp103.
