No es posible ser
felices si no se vive una vida sabia, hermosa y justa.
Epicuro
Resumen:
La felicidad del epicureísmo
no es lo mismo que el hedonismo, pero coinciden en el placer.
Epicuro definió al
placer como la satisfacción de las necesidades del cuerpo y la tranquilidad del
alma. En cambio, el hedonismo puro, no concibe el placer como un bien, sino
como el único y supremo bien.
Para el filósofo
griego, el propósito de la vida humana es alcanzar la felicidad, evitando las
sensaciones dolorosas y buscando las placenteras. Considerando que los placeres
son la ausencia de dolor y la tranquilidad mental.
Epicuro se manifestó
contra de los excesos y los deseos innecesarios y consideraba que la felicidad
estaba constituida por los siguientes factores:
Tranquilidad.
Liberación del miedo.
Ausencia de dolor
corporal.
El valor de la amistad
El epicureísmo y el
hedonismo
En “La Felicidad de
Epicuro no es lo mismo que el hedonismo, pero coinciden en el placer” (1), se
consideró lo siguiente:
En el Modelo
Integrado de la Felicidad (MIFE), que considera una
propuesta de mejoramiento del nivel de felicidad basado en una visión holística,
el nivel básico es el plano físico de nuestra vida terrena, que está
asociado principalmente a nuestro cuerpo y a los placeres.
En relación con
los placeres, existen corrientes filosóficas que vienen de los griegos y que
algunas de ellas se confunden como son los casos de epicureísmo y del
hedonismo.
Epicuro definió
al placer como la satisfacción de las necesidades del cuerpo y la tranquilidad
del alma. En cambio, el hedonismo puro, no
concibe el placer como un bien, sino como el único y supremo bien.
Se entregan a
continuación extractos del artículo de María Alejandra Morgado Cusati: “Epicuro
y su filosofía sobre la felicidad”, que proporciona más antecedentes del
filósofo Epicuro en relación a su concepción de la felicidad.
Epicuro y su
filosofía sobre la felicidad
Epicuro de Samos (341
a. C. – 270 a. C.) fue un filósofo griego que planteó una teoría ética
basada en el hedonismo. Pues consideraba que el propósito de la vida
humana era alcanzar la felicidad, evitando las sensaciones dolorosas y buscando
las placenteras.
Sin embargo, su visión
del placer dista mucho de las posturas hedonistas que defienden que el placer y
la felicidad se encuentran en los lujos y en los excesos. Al contrario, para
Epicuro la vida más placentera se halla en la sencillez y en la abstención de
deseos innecesarios.
A pesar de que la filosofía
de Epicuro fue planteada hace siglos, hoy en día sigue vigente y representa una
excelente vía para alcanzar la felicidad personal. Veamos en qué consiste y
cómo podemos aplicar esta doctrina en nuestras vidas.
La filosofía de
Epicuro
Epicuro fundó su
escuela de filosofía en Atenas. Se llamó el Jardín y se dedicaba a la búsqueda
de la felicidad a través del ejercicio de la razón.
Para este gran pensador, la razón enseña que el placer es bueno y el dolor es
malo. De manera que el placer y el dolor son las medidas últimas del bien y del
mal.
Ahora bien, la
perspectiva epicúrea ha sido malinterpretada hacia un hedonismo desenfrenado,
en lugar de la ausencia de dolor y tranquilidad mental (ataraxia) que
Epicuro realmente defendía. De hecho, este filósofo se manifestó en contra
de los excesos y los deseos innecesarios por su capacidad de conducirnos al
dolor.
La felicidad
según Epicuro
Para Epicuro, la
felicidad es placer y serenidad, un estado en el que no hay perturbaciones del
alma ni dolor alguno. Además, defiende que la felicidad es un fin en sí
mismo y el mayor bien de la vida humana.
De esta forma, el
filósofo consideraba que la felicidad estaba constituida por tres factores:
Tranquilidad.
Liberación del
miedo.
Ausencia de
dolor corporal.
El valor de la
amistad
Por último, el
epicureísmo enfatiza la amistad como uno de los mayores medios para obtener el
placer y, por ende, la felicidad. En este caso, la conexión con amigos ofrece
una sensación de seguridad, mientras que la desconexión conduce al aislamiento,
la desesperación y una mayor susceptibilidad al peligro.
¿Cómo aplicar el
epicureísmo en nuestras vidas?
Para Epicuro, la
felicidad se logra perdiendo el miedo a Dios y a la muerte; y aceptando que es
fácil adquirir las cosas buenas de la vida y soportar las terribles.
El dolor no es completamente
inevitable, pero sí se puede soportar. De hecho, Epicuro afirma que es
posible experimentar felicidad mientras sufrimos un dolor emocional o físico.
Para ello, enfoquémonos
en cultivar una vida sencilla. Disfrutar de las pequeñas cosas de la vida,
practicar la gratitud y ver lo positivo de las situaciones negativas.
La felicidad para
Epicuro
Para Epicuro el
propósito de la vida humana era alcanzar la felicidad, evitando las sensaciones
dolorosas y buscando las placenteras.
La perspectiva epicúrea
de los placeres es la ausencia de dolor y tranquilidad mental (ataraxia).
El filósofo se
manifestó contra de los excesos y los deseos innecesarios y consideraba que la
felicidad estaba constituida por los siguientes factores:
Tranquilidad.
Liberación del miedo.
Ausencia de dolor
corporal.
El valor de la amistad
Para Epicuro el dolor
no es completamente inevitable, pero sí se puede soportar. De hecho, afirma que
es posible experimentar felicidad mientras sufrimos un dolor emocional o físico.
La recomendación que
nos da es que nos enfoquémonos en cultivar una vida sencilla, disfrutar de las
pequeñas cosas de la vida, practicar la gratitud y ver lo positivo de las
situaciones de la vida.
Un abrazo,
Referencias:
(1) Citado
en: Víctor Hugo Ramón Vergara Medina, “La Felicidad de Epicuro no es lo mismo
que el hedonismo, pero coinciden en el placer”, https://prisma101-1.blogspot.com/2021/04/la-felicidad-de-epicuro-no-es-lo-mismo.html,
29 abril 2021.
(2) Citado
en: Maria Alejandra Morgado Cusati, “Epicuro y su
filosofía sobre la felicidad”, https://mejorconsalud.as.com/epicuro-filosofia-felicidad/,
9 abril 2022.
(3) Imagen
obtenida de: https://www.youtube.com/watch?v=PqW8jMAk_tU,
consultado 19 agosto 2022.
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